Mañana por fin es 27 de junio, y los seguidores de ‘Weeds’ sabrán por qué esta fecha es tan importante. Hace casi un año que la sexta temporada de esta serie que nos muestra “la otra América” acabó su sexta temporada y mañana por fin podremos empezar a ver la séptima. Esta entrada va a contener spoilers de lo ocurrido en la serie, así que si la estás viendo o no la has visto, cuidado. Para que estemos preparados para mañana, veo pertinente hacer un respaso a la última temporada. Ésta empezó justo después de “¿Un mazo de croquet?”, “no encontraba palos de golf.”El seguimiento de esta tanda de capítulos ha sido diferente a lo que estamos acostumbrados, pues al tratarse de una road-temporarada (que han ido por la carretera como nómadas), cada episodio nos contaba historias casi independientes, eso sí, cada una de ellas era fascinante. Esta independencia episódica, por llamarlo de alguna forma, ha hecho que muchas tramas hayan quedado un poco inconclusas, dejando al espectador con ganas de más. Si por mí fuera, toda una temporada trabajando en el hotel habría sido genial, pero la idea de que fuese un camino en la carretera imposibilitaba esa idea. Nos quedamos con ganas de ver más a profundidad las grandes historias que por rapidez en el ritmo de ‘Weeds’ no pudimos, como saber más del verdadero padre de Silas y la pandilla de madres que de las que se hace amigo Shane en el parque, o la época del cámping, con el camarero y el hombre loco al que bautizan.
Lo que me impresiona de esta serie es que cada temporada acaba de un fascinante modo que parece que acabe la serie, o al menos hace que te preguntes cómo podrá continuar, pareciendo imposible. Pero siempre lo han conseguido y se han superado. El final de la tercera temporada marcó un antes y un después, el giro que pegó fue muy grande, cuando acabó la quinta, otro gran cambio de rumbo hubo en la familia de Nancy, y ahora al acabar la 6ª parece que va a haber otro, y de los más grandes. La familia va a estar separada por el océano Atlántico.
Durante la sexta temporada, Nancy pasa a llamarse Nathalie; Andy, Randy; Silas, Mike; y Shane, Sean. Y nada de Botwin, ahora eran los Newman. Pero este cambio no hizo que la familia fuese más afortunada, porque los problemas han seguido adelante, sin conseguir nunca sus objetivos.Por ahora sabemos que está en la cárcel, y según se ha podido ver en ciertos trailers, a la protagonista le darán la condicional y pasará a tener una nueva vida en Nueva York, mientras que Andy, Silas y Shane están en Dinamarca. ¿Y qué pasará con Doug y el bebé Stevie? Ya no queda nada para ver las nuevas aventuras de estos increíbles personajes, sobre todo los cuatro protagonistas que son imprescindibles y que seguro que siguen impresionando episodio tras episodio. Espero que los rumores de que es la última temporada sean falsos y no nos quedemos sin los Botwin.
Muchos piensan que el espíritu de la serie se ha perdido. ¿Pero cuál es el espíritu de la serie? Desde mi punto de vista sigue siendo genial, sin haber olvidado el tema principal: una madre que hace todo lo posible para sacar a su familia adelante. Posiblemente en esta séptima temporada volvamos a verla cultivando o vendiendo marihuana. Ya se trató mucho ese tema, pero pienso que eso es una parte importante de ese espíritu del que hablamos, pues para Nancy es lo más cómodo, aunque siempre acabe metida en líos.
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