"Tiene su punto trabajar al borde de lo inesperado"
La actriz en el escenario de la obra de teatro. |
Antes de una función de 'Venecia bajo la nieve', Eva Isanta nos recibe en su camerino del teatro para hablar de su obra de teatro y de los éxitos que cosecha en televisión. En el teatro Lara de Madrid se puede disfrutar de esta divertidísima y sorprendente función junto a los actores Pablo Carbonell, Marina San José y Carlos Heredia en la que dos parejas se reúnen para una cena y sucede todo lo inesperado mientras el público no para de reír y disfrutar de lo que nos cuentan. En 'Venecia bajo la nieve', Eva es Patricia, una mujer que por no hablar, le toman por extranjera, concretamente de Chuvenia. También aprovechamos para hablar con ella sobre su serie 'La que se avecina', que dentro de poco comenzará a grabar la sexta temporada, visto el auge de audiencia y el éxito en el que se ha convertido la serie. Hablamos con ella de la evolución de Maite, de la palabra "salami", de las grabaciones, de las repeticiones en la TDT y de su paso por 'Aquí no hay quien viva'. Como periodista, siempre que hago una entrevista me pregunto si poner entre paréntesis la palabra "risas" cuando el entrevistado ríe. Debo decir que aquí he decidido no ponerlo porque saldría cada tres palabras. Eva nos respondió muy simpática, risueña y poniendo mucho interés en cada respuesta, y desde aquí le agradecemos su interés y su amabilidad al responder la entrevista. Allá vamos.
¿Qué nos cuenta ‘Venecia bajo la nieve’?
‘Venecia bajo la nieve’ hace una reflexión en clave de humor sobre el mundo de la pareja. Son dos compañeros de la universidad que se encuentran muchos años después y coinciden con sus distintas parejas en la casa de uno de ellos. Y están en dos momentos muy diferentes, entonces la reflexión es cómo puede evolucionar la pareja y cómo pueden sentirse en cada momento. También habla sobre el mundo de los refugiados, son palabras del autor, que vino a ver la función y nos lo dijo, que es una reflexión con humor del concepto que tenemos los demás sobre los refugiados. Hoy en día con tanta inmigración como hay, pues es un tema candente. Y también sobre las convenciones sociales.
Usted es Patricia, una mujer que no habla, por lo menos en un principio. ¿Cómo se prepara un personaje así?
Jo, pues de entrada es bastante difícil, aunque parece que no. Gente que no es de la profesión, pues no sé por ejemplo mi madre, que me dice: “Hija, pero si tampoco trabajas tanto, si no hablas”. Y lo que no saben es que es mucho más complicado, porque tienes que estar con una energía determinada, dando verdad a lo que está pasando siendo espectador y siendo siempre una torre de alto voltaje; tienes que estar manifestando todo lo que sucede alrededor. Entonces, realmente a mí me parecía al principio muy difícil, pero por eso también me apetecía mucho el personaje, porque es un reto. Y me lo paso muy bien, escuchando.
Y la toman por extranjera, que por cierto en Google Maps no aparece Chuvenia.
Hombre, Chuvenia está… Paramod Yugoslavia paroj. O sea, tiene que estar ahí. Seguro, eh. Tú busca.
Póster de la función que se puede ver en el Teatro Lara. |
Buscaré. Las críticas de ‘Venecia bajo la nieve’ no hacen más que decir que la función provoca una risa continua, una carcajada detrás de otra y que hay una gran conexión con el público. Se nota que le gusta la comedia y el humor.
Sí, yo siempre he pensado que era una buena actriz dramática, pero llevo mucho tiempo viviendo de la comedia, o sea, que ya no lo sé, lo pongo en duda. Debe ser que sí, pero vamos, yo intento desarrollar cada día un poquito más el sentido del humor tanto como actriz como como persona, porque si no estaríamos todos muertos.
Otra cosa que destacan es el equipo actoral. ¿Qué piensa de sus compañeros y del conjunto incluyéndose a usted?
Yo creo que hemos hecho un buen trabajo, sinceramente. Ahora no tiene nada que ver con los primeros ensayos entre cuatro actores tan diferentes como Marina, Carlos, Pablo y yo, que no tenemos nada que ver, porque veníamos cada uno de una escuela, de un estilo… Entonces yo creo que ahí Gabriel Olivares ha hecho verdaderos malabares y ha conseguido que estemos francamente empastados, o sea, estamos todos a lo mismo, que es de lo que se trata en todo tipo de montaje. Tú en un proyecto tienes que intentar no que los actores hagan cada uno su show sino que todos ayuden a contar la historia. Cuanta más complicidad haya entre ellos, mejor se lo pasen y más buen rollo, pues mucho mejor se cuenta. Y yo creo que aquí ha ido pasando; se ha ido fraguando en los ensayos y lo hemos ido consolidando con el público y realmente trabajamos en equipo, y eso se nota y se transmite al público. Pueden decir “mira qué bien está no se quién”, pero en general dicen que la función está muy bien, que es lo que tienen que decir. Lo que mola es que la historia se cuente bien contada.
Sí, eso es una realidad, o sea, antes la televisión era como denostada por la misma profesión, era como que la gente que hacía televisión no hacía teatro y no hacía sobre todo cine, y hoy en día el concepto de industria, que es lo que tenemos que cambiar un poquito aquí en España, está funcionando de otra manera. Precisamente, la gente quiere ver en el teatro a las personas que reconoce y le gustan en televisión. Realmente sí, los actores que hacemos tele somos un reclamo en las tablas.
Eva sentada en la casa donde transcurre la función. |
Hace un tiempo dijo que sus compañeros que compaginaban la serie con teatro eran unos valientes, y ahora lo haces usted. Cómo lleva compaginar ambos medios?
Sí, sí. Soy una valiente total. No he empezado aún a grabar pero compaginé ensayos de la obra con la última temporada de grabación y francamente es un sobresfuerzo impresionante. Tienes que administrar muy bien tu energía, trabajar muchas horas, y ponerle muchas ganas y mucha ilusión. Que sí, que hay que ser valiente. Pero vamos, que estoy dispuesta, ¿eh?
¿Ya sabe cómo va a irle a Maite, su personaje, en la 6ª temporada?
Qué va. Es que en ‘La que se avecina’ pasa una cosa muy curiosa y es que se supone que empezábamos a grabar ya y se ha retrasado la cosa, y al final grabaremos el mes que viene o cuando se tengan listas las cosas. El guión no te lo dan hasta unos días antes, y sólo te dan uno aunque tengan varios, con lo cual yo nunca sé lo que va a pasarle a mi personaje hasta que no me llega cada guión. Entonces no te puedo decir. Más quisiera saber yo qué me va a pasar. No tengo ni idea. También tiene una parte divertida, que es la de decir “me mola que no sé lo que pasa” y que te sorprenda. Pensar “jo, vaya idea que se les ha ocurrido, qué divertido”. Eso tiene su parte divertida, pero no tengo ni idea.
Entonces estás contenta con la evolución del personaje.
¿De la cuqui? Sí, sí, sí. A mí me gustan mucho las cosas que me hacen. Esta temporada ya te digo que yo fui la primera sorprendida gratamente cuando me llega un guión y digo: “¡Ay, cómo se pasan, qué fuerte!”. Tiene su punto trabajar así un poco al borde de lo inesperado.
¿En la calle quién eres para la gente que te reconoce: Eva, Bea, Maite, la cuqui…?
Ahora la cuqui. Hubo un momento en que era Bea, y ha sido hasta hace relativamente poco. Pero yo empecé a darme cuenta de lo consolidada que estaba ‘La que se avecina’ cuando ya la gente me dice cuqui.
¿Y Eva con qué se queda, con Bea o con Maite?
Yo… con lo que me toca hacer en cada momento. Yo no tengo personaje favorito y esto era un poco “todos eran mis hijos”. Yo me lo paso muy bien con Patricia, me lo paso muy bien con la cuqui, con Bea me lo pasaba fenomenal, y espero que si mañana me llamo Arancha y soy esquimal, pues me lo paso igual de bien.
Su personaje es el que mayor cambio tuvo con el cambio de la serie, porque otros actores como José Luis Gil interpretan un personaje muy similar.
Sí, y la verdad es que eso es una suerte también, porque siempre tienes el miedo de que el personaje funcione o no, o de que se compare en función del otro… Pero en realidad las características de Bea y de Maite están tan lejanas que aunque sea yo la misma actriz con misma voz y el mismo cuerpo, no tienen nada que ver, son almas distintas. Para mí está muy bien el reto primero como actriz porque eso es lo que nos gusta a todos los actores, y también está muy bien que los dos personajes hayan sido aceptados y queridos que es lo mejor que te puede pasar.
El equipo de 'La que se avecina' de la 5ª temporada. |
¿Las palabras salami y merengue suenan mucho en tu vida fuera del trabajo?
Pues mira, sí, no te voy a decir que no. Siempre que alguien quiere hacer una gracia, desde la acera de enfrente me dicen que si quiero salami o merengue merengue y ese tipo de cosas. A mí me hace gracia y no me molesta demasiado. Sí que me molesta a lo mejor cuando voy con mi hijo y hacen la típica gracia de si quiero salami, entonces claro, el niño pregunta, y yo le digo “cariño, pues que si quiero salami en el bocadillo; que si quiero merendar, vaya”.
Conocemos las bajas que se han dado para la nueva temporada, pero ¿qué nos puedes contar de las incorporaciones? ¿Afectarán al mundo de Maite?
Pues si te digo la verdad no lo sé. Te digo lo mismo que los guiones, que esta productora mantiene un secretismo absoluto y había ciertos rumores de negociación con ciertos actores que se habían marchado pero no sé qué ha pasado porque no tengo noticias, así que no se ha concretado nada. Y como no he visto los guiones para saber quién entra y quién no, lo siento pero no te puedo contar nada.
¿Cómo son los ensayos y las grabaciones de la serie? Debéis estar siempre de buen humor y riéndose.
Depende. En general hay un buen tono de trabajo, hay buen rollo y nos lo pasamos bien. Pero luego hay días y días. Grabar un capítulo suele ser dos semanas, con lo cual si tienes mucha intensidad, imagínate, puede pasar de todo. Hay ensayos y grabaciones que son un descojone, hay días mejores, días peores, el equipo está mejor, o está peor, los episódicos que vienen entran perfectamente en el ritmo, o no… Entonces depende de muchos factores externos. Pero en general, la tónica es que nos lo pasamos bien.
Los ataques de risa son peligrosos.
Y en mi caso mucho. Yo tengo mucho peligro, tengo mi punto débil ahí.
Poco a poco, la serie ha llegado a convertirse en un exitazo. Laura Caballero dijo que ‘La que se avecina’ era el mejor ejemplo de que es interesante que las cadenas tengan paciencia. ¿Qué opinas de la rapidez con la que se retiran ciertos espacios?
A mí me parece un error, porque la gente necesita tiempo para acostumbrarse. Tienes que dejar que la gente conozca la serie, los personajes… y darle por lo menos un mínimo espacio. ‘La que se avecina’ como dice Laura, que es muy lista y sabe muchísimo de este oficio, pues es el mejor ejemplo. Yo pienso que crea inseguridad, incertidumbre, que nos tiene a todos al borde del abismo, y que deberían intentar cambiar ese factor de audiencia inmediata. Todo el mundo quiere hacer bombazos, pero los bombazos no suceden siempre, es al revés: de muchos productos que hay en el mercado, uno es un bombazo. Estamos en una sociedad en lo que todo tiene que ser ya, aquí y ahora. Quiero esto y lo quiero ya. Quiero una tele y me la quiero ya. Aunque no tenga dinero tiro de la tarjeta de débito. Ese concepto que tienen los ejecutivos hoy en día de las cadenas televisivas de lo inmediato debe cambiarse, porque se olvidan otros factores como esfuerzo, trabajo y constancia.
Eva Isanta junto a la mesa donde se desarrolla la cena de la función. |
El éxito actual de ‘La que se avecina’ también puede deberse a que ha conseguido ser una serie independiente y ya no se ve como ‘Aquí no hay quien viva 2’.
En efecto, y eso ha costado por lo menos tres o cuatro temporadas. Pero la gente nos ha ido perdonando que dejáramos de hacer la otra, porque al principio nos culpabilizaban y nos decían “¿Por qué no hacéis ésta?”. Yo que sé, yo soy una mandada. Si yo pudiera decidir qué se compra y qué se vende… pero son cosas como las audiencias, que se nos escapa. Entonces sí, hace mucho que se consolidó y se nota mucho.
Para acabar, ¿qué le parecen las múltiples repeticiones que se hacen en la TDT? Que yo ya no sé si estoy hablando con Eva Isanta o con una repetición de neox o FDF.
No, no, estás hablando con Eva. Mira, en el teatro eso no pasa, al teatro sabes que vienes a ver a la gente en vivo y en directo sin repeticiones, y lo que vas a vivir ese día es lo que vas a vivir: nos equivoquemos de texto, nos caigamos, se rompa una silla, o pase lo que pase. Es la maravilla del directo del teatro.
Pero ahora con la TDT hay 50 canales pero parece que sólo hagan ‘Aquí no hay quien viva’ y ‘La que se avecina’.
Mira, el otro día conocí a una actriz inglesa que no sabía que yo hacía una serie y me dijo: “Ah, ¿y dónde la ponen?” y le dije: “No lo sé”. Yo no tengo ni idea de dónde estamos programados, sé que estamos en tres o cuatro.
Eso es buena señal, cuanto más se emita más se conoce. Puede que a las repeticiones de la TDT se haya debido el auge de ‘La que se avecina’.
Sí, ha tenido mucho que ver. El factor repetición ha hecho que mucha gente que no había visto la serie en horario de prime time, pues la haya visto después y se haya enganchado viendo capítulos anteriores y hayan seguido el hilo de los personajes que ven ahora en la actualidad y ven cómo éramos en el pasado porque hemos evolucionado bastante. Cuqui mira cómo está, subiéndose por las paredes ya.