10 noviembre 2014

Begoña Maestre en la pizarra


"Actores y actrices en la pizarra" es un nuevo proyecto (y sección en Nuestra Ficción) en el que desfilarán rostros populares del teatro y de la gran y pequeña pantalla para someterse a una distendida conversación frente a una pizarra. En el primer programa entrevista a Begoña Maestre, quien actualmente interpreta a Laura la pastelera en la serie 'Chiringuito de Pepe'.
Así funciona: Un actor o una actiz, una pizarra y una conversación repasando la filmografía y conociendo distintos puntos de vista sobre el oficio del intérprete. A través de cuatro trabajos destacados, se irá conociendo mejor al invitado de cada programa, al que además veremos contestar vuestros tweets, responder preguntas del entrevistado anterior, se enterarán de cosas que dicen de ellos en Internet y como no podía ser de otra forma, les veremos actuar.
Begoña Maestre:
"Me encanta que se peguen cosas de los personajes estupendos que interpreto"

Más fotografías e información del programa en www.actoresenlapizarra.com

13 octubre 2014

'The Knick': sexo, drogas, sangre... y medicina



Crítica con spoilers del capítulo piloto de 'The Knick'. 
Parece mentira lo que evoluciona todo y como hemos cambiado en un siglo en aspectos como la medicina. ‘The knick’ se desarrolla en un hospital de Nueva York en 1900 y nos muestra las primeras etapas de la cirugía, las innovaciones científicas de entonces y las relaciones laborales entre los sanitarios. Lo que llama la atención de la serie y anima a interesarse -como mínimo- es la presencia de Steven Soderbergh en la producción, el guión y en ciertos episodios, la dirección; y la del actor Clive Owen como protagonista y productor ejecutivo.  
El doctor John Thackery (Owen) es el cirujano jefe del hospital Knickerbocker después de que el anterior se suicidase por no salir con éxito de una operación. Él es drogadicto (cosa que puede recordar a ‘Nurse Jackie’ o ‘House’, sólo que aquí visten con ropa de época), además es racista, putero y sin ganas de hacer amigos. La llegada de un nuevo doctor muy bien preparado pero negro, creará un conflicto racial, ya que Thackery no ve con buenos ojos que en las manos del nuevo pueda estar la vida de los pacientes. Además de ellos, muchos más médicos y enfermeras completan el número de personajes.  
La serie empieza fuerte. Nos encontramos a una embarazada en la sala de operaciones a la que se le ha complicado todo y ella sólo pide que salven al bebé. Después de mucho rato, gasas, sangre, sudor… la criatura nace por cesárea, pero sin vida. Es hora de cerrar a la madre, pero todo se vuelve más difícil y es imposible salvarle. Así que comenzamos con dos muertes a la que hay que añadir el suicidio que viene en la secuencia siguiente del doctor que comentábamos antes. Con las dos pérdidas en la sala nos demuestra algo la serie: que son médicos pero no dioses, y que nos van a mostrar su parte más humana y realista en la serie. 
‘The Knick’ no es una serie para todo el mundo, sino que los espectadores necesitan una sensibilidad apta, ya que quien tenga un estómago sensible no está frente a la ficción más adecuada. Los cortes en la carne en planos detalles y los desparrames de sangre son las cosas que hacen que mucha gente tenga que apartar la mirada de la pantalla en bastantes ocasiones. La serie ha sido renovada por una segunda temporada con otros diez capítulos, y todo indica que el estilo y la cantidad de escenas “gore” será la misma. 

26 julio 2014

Mirando la tele de... Patrick Criado



Desde 2009 es uno de los personajes más representativos del panorama televisivo al ser uno de los protagonistas de 'Águila Roja' interpretando a Nuño. Aun así, antes de comenzar con este personaje, Patrick Criado ha pasado por varias series como 'Amar en tiempos revueltos', 'El comisario' y 'Niños Robados'. Aparte, tuvo otro papel fijo en una ficción llamada 'Con dos tacones' que se emitió 2006 y él daba vida a Lucas, el hijo de Iván Sánchez.

Mi primer recuerdo de la tele es… mirando hacia atrás, televisivamente hablando, yo creo que es el 'Grand Prix'. Además recuerdo que lo veíamos toda la familia, se hablaba del 'Grand Prix' en el colegio... Es de los primeros recuerdos que tengo.
Cuando enciendo la tele busco… algún canal que me aporte algo o que lo que esté viendo sea por ejemplo un documental interesante. Suelo ver 'Equipo de investigación' y este tipo de cosas que me aportan algo y que me hacen aprender. No suelo ver nada que no me aporte nada.
Hago zapping cuando… cuando estoy en mi casa y no tengo nada, absolutamente nada que hacer, ya me he visto algunos capítulo de algo y estoy cansado, me pongo la tele. Pero no suelo verla de todas formas.
Veo la tele cuando… no tengo nada que hacer. 
Admiro de la tele que… yo creo que el fenómeno mediático que tiene la televisión, que es capaz de sacar un reality y que las personas que hayan salido en ese reality, durante un mes sean dioses. Eso sólo lo consigue la televisión; prácticamente ni el cine.
Al día, mi tele está encendida… a la hora de la siesta porque mis padres suelen tener la tele encendida y después de cenar alguna serie que quieran ver y que veamos toda la familia. Suelen ser los horarios más o menos.
Estoy enganchado a… pues a 'Velvet'. Me parece muy buena serie, contada muy bien, con muy buena calidad, muy buenos actores..., me parece una serie que es para ver.
Me quedo bobo al ver… algún documental muy muy muy bien contado que se mete de verdad. Imagínate un reportaje sobre drogas o sobre la policía, que de verdad de mete la cámara dentro y te enseñan bien lo que está pasando, me quedo tonto viéndolo, porque me parece que está muy bien contado.
No soporto… los canales del corazón, todos los programas que tengan que ver con este tipo de cosas no los aguanto, no los veo.
Me río mucho viendo… 'Muchachada Nui'.
Lloré viendo… 'Supervivientes'. Lloro cuando lo pongo. Digo: "No puede ser, no puede ser".
Me he quedado dormido viendo… documentales. Me gustan pero hay veces que estás muy cansado que te duermes.
Pensé que nunca vería… Pensé que nunca podría tener tanto fenómeno mediático estos programas del corazón que hablan sobre Belén Esteban y no sé quién más. Pensé que la gente no se iba a interesar tanto por este tipo de cosas, pero bueno. es no lo sé. Es que no sé. Lo he visto todo en televisión.
La tele podría mejorar… si se centrara más en la cultura y en mandar un buen mensaje con programas educativos que enseñaran a la gente algo y no simplemente le hiciera perder el tiempo pegado a una pantalla. 
Me encantaría participar en… en alguna serie que de verdad esté hecha con calidad, bien tratada y que esté grabada como en cine. Me gustaría participar en una serie bien hecha, que de verdad se preocupe en la calidad y no tanto en gustar a todo el público sino que se centre en un determinado público. 
Nunca aparecería en… 'Sálvame'. Nunca participaría en tu programa, Jorge Javier. Lo siento.
Echo en falta… programas con calidad en nuestra televisión.
Mi mejor recuerdo trabajando en televisión es… en 'Águila Roja'. Guardo muchos recuerdos, pero sobre todo guardo del equipo y de toda la gente que hay ahí, que me parecen unos profesionales maravillosos y que curran como nadie. 
La primera vez que salí en televisión fue... primera primerísima vezn debió ser en 'Hospital Central' cuando era pequeño que me metí en una agencia de figuración y lo hacía con mi madre. Pero vamos, que ni se me ve, yo creo. No he visto eso pero yo creo que ni se me ve o se me verá de fondo

¡También puedes verlo en vídeo!

24 julio 2014

El evento de la final de 'Masterchef'



Después de semanas entre fogones, aromas y agudizando el paladar, la segunda edición de 'Masterchef' cerró sus puertas al mismo tiempo que abría las del Kinepolis Madrid para que los fans del programa pudiesen conocer el nombre del ganador acompañados de todos los aspirantes y de los niños de 'Masterchef Junior'. Durante el photocall era curioso ver cómo los concursantes más pequeños pedían hacerse fotos con los adultos que han estado en la reciente edición, y cómo todos se saludaban como si se conocieran de toda la vida. Mateo apareció de los primeros, ¿pero dónde estaba Vicky? A lo mejor había perdido y pasaba de ir al evento para estar de morros; pero por otro lado, a Mateo no se le veía con un moratón en el ojo. No entendíamos nada. Bueno, todo se entendió cuando apareció Vicky con una sonrisa de oreja a oreja que dejaba claro su triunfo. 
Una vez posados todos los aspirantes, los junior, el jurado, la presentadora y los finalistas, todos entraron a la sala donde se iba a proyectar el programa final en directo, al mismo tiempo que lo iban a ver todos los espectadores en su casa. Salieron a presentarlo, pero el tiempo se les echó encima porque ya empezaba la cabecera y hubo que correr a buscar asiento. Rápidamente, a Eva González le dio tiempo a preguntar cómo se sentían al haber llegado hasta la final. Un educado Mateo dijo ante todos los asistentes a la sala que estaba emocionado y que es muy grande todo lo que ha pasado. En cambio Vicky, volvió a mostrar su personalidad y entre risas soltó un "me la suda". 
La emisión empezó entre aplausos con lo mejor de cada uno de los finalistas. Luego tuvo que preparar cada uno tres platos (entrante, principal y postre) para sorprender al jurado y a los chefs Roca, con el tiempo jugando en su contra como siempre. Ella estuvo tranquila, él viendo cómo se le quemaban las cosas. Todo esto, ante la mirada del jurado, de todos los aspirantes que se quedaron en el camino, y de dos familiares de cada uno. Aunque los dos hicieron platos que ríete tú de los de Arguiñano. Nada más probarlos dijeron, casi sin crear tensión, que la ganadora de Masterchef era Vicky. Ella, que se encontraba en la sala, se sorprendió como si no lo supiera. Abrazó a Mateo y se puso en pie, y al poco tiempo lo hicieron todos sus compañeros que se acercaron a ella para felicitarle y darle besos. Bueno, y a él, al otro finalista también se acercaron todos, ya que no es tarea fácil llegar a donde han llegado. 
Tras un interminable debate repitiendo imágenes y resucitando a Gonzalo, el programa acabó una hora después de lo habitual y todos volvieron a salir al escenario para agradecer la asistencia y la expectación ante 'Masterchef'. Eva González quiso recordar que en breve volverán con la versión Junior y se despidió como hace cada miércoles: con un "Pónganle sabor a la vida". Ahora toca hacer la digestión, y esperar hasta el siguiente atracón.

15 julio 2014

El éxito de 'Chiringuito de Pepe'



Admito que al conocer que la nueva serie de Telecinco se iba a llamar ‘Chiringuito de Pepe’, tuve algo de prejuicios a la hora de empezar a verla. Con ese nombre se relaciona a fritanga, a suciedad, a cartas de menú pegadas que hay que estirar para ver los platos combinados…, en definitiva, algo que crees que sólo por verlo ya te vas a ensuciar. Pero el reparto de actores que tenía la serie me hizo darle una oportunidad y ver el primer capítulo llevándome una grata sorpresa. Me gustó y mucho. 
Aprovechando el tirón culinario que está teniendo la televisión, esta serie ha llegado en el momento perfecto, ya que entre ‘Top Chef’, ‘Pesadilla en la cocina’, ‘Masterchef’ y programas como el de Arguiñano, nos han dejado claro que a los espectadores nos gusta el mundo de la cocina. Mucha gente ha catalogado ‘Chiringuito de Pepe’ como una mezcla entre ‘Los Serrano’ y ‘Verano azul’, pero yo no veo ninguna similitud con estas dos series más que en la primera estaba Bonilla y en la segunda era el mar el protagonista. En cambio, yo la veo como una mezcla de Chicote y ‘Doctor Mateo’ (un pijo que llega a un pueblo y tiene que adaptarse; en vez de una taberna hay un chiringuito; en vez de la panadera, una pastelera; y en vez de una verdulera con un novio más joven y negro, una pescadera con un novio más joven y negro). Pero claro, llamar a la serie ‘Chef Sergi’ era raro fonéticamente y ‘Pesadilla en el chiringuito’ era redundante. 
La sorpresa y el éxito de ‘Chiringuito de Pepe’ llegó porque no nos la vendieron como una serie ambiciosa y no prometían nada que no nos iban a dar. Creo que incluso era lo contrario y eso es lo que nos ha gustado a todo el público: que es una serie con mayor calidad de lo que nos presentaban. Son tramas consistentes (aunque no siempre innovadoras, pero no decepcionan), tiene una cantidad de exteriores envidiables para otras series, y nos presentan una Peñíscola que se agradece ver ambientes diferentes al que se ve en otras series –grabadas en su mayoría en Madrid-. Y mola que además de ‘El País’ y ‘Estrella Damm’ que nos la meten en cada capítulo, también nos estén dando publicidad de este maravilloso pueblo de Castellón. 
Como comentaba antes, los actores son todos maravillosos. Una serie capitaneada por Santi Millán es un sello de garantía. Begoña Maestre da luz a cada proyecto que hace con su magistrales interpretaciones y su belleza. Blanca Portillo, con su prestigio, da caché a la serie, y se agradece volver a verla en una serie de comedia. Jesús Bonilla, que aunque lo tenía atragantado por ser Santiago Serrano, me ha gustado esta vez con un personaje tan divertido. El Langui ha sido la sorpresa, y lo que poca gente recuerda es que es el único del reparto que tiene un Goya como intérprete. Adrián Rodríguez abandona los personajes de adolescente para empezar a ser adulto. Dafne Fernández ha sido otra sorpresa para mí, ya que no nos tiene acostumbrados al humor y creo que ahora está en su salsa y en su mejor registro. Y finalmente los niños, y de los cuales me quedo con la chica que la adoptaba desde ya.

En definitiva es una serie perfecta para la época estival. No se podría haber emitido en otro momento o al menos el arranque de los primeros capítulos. Posiblemente esta serie en invierno compitiendo contra ‘Sin identidad’, por ejemplo, no habría tenido el mismo éxito que ha cosechado. Ha renovado por más capítulos, pero la pena es que no estén ya listos para emitirlos y vayan a hacer un parón, porque ahora es cuando está en un momento inmejorable. El tiempo acompaña, la gente quiere ver playa, está teniendo una media de 4 millones de espectadores cada semana y en definitiva, creo que no es el mejor momento de pararla. No podemos hacer nada más que esperar a que vuelva, que ya estamos todos con ganas de más capítulos de esta serie que ofrece entretenimiento, una palabra que cada vez cuesta más encontrar en la ficción.

15 junio 2014

Entrevista a Eva Hache



"Igual hay chistes que algunos no entienden pero los más avispados agradecerán que el que está al lado no lo haya pillado" 

'El club de la comedia' reabre sus puertas al teatro para que millones de seguidores puedan disfrutar del humor del programa. Por cuarta temporada consecutiva en La Sexta, Eva Hache va a ser la maestra de ceremonias y hemos charlado un poco con ella para que nos hable sobre las novedades de las nuevas entregas y sobre a situación en España del humor en general y del de los monólogos en particular. 
¿Por qué tanta espera para la vuelta de ‘El club de la comedia’?


Yo creo que ‘El club de la comedia’ funciona tan bien y  ala gente le gusta tanto que deberían hacerse dos temporadas al año. Pero claro, en las cadenas cada vez tienen más cuidado y van administrando los programas y los estrenos como los camellos la droga: te van administrando un poco para que te guste y luego se hacen esperar o se van de vacaciones en verano. Para nosotros es duro, pero es cierto que a lo mejor para el formato pues está bien.


No creo que sea un tema de presupuesto porque tampoco es un formato muy caro comparado con otros.
Bueno, yo cobro una barbaridad. No, es cierto que comparados con la ficción, los programas de entretenimiento siempre son mucho más baratos.


Esta temporada, con la ampliación de secciones, vas a ser tú la protagonista total.


Sí, voy a ser yo todo el rato. Yo dije: “A ver si la gente se va a cansar”, pero me dijeron: “No, porque la gente te ama”, y yo me lo creí. Yo soy muy discreta y les dije que igual sí que era demasiado, pero es verdad que los sketches son pildoritas del estilo de ‘Splunge’: una frase, una apuntadita que van a al hilo del monólogo… Va a ser yo, luego yo, y luego… yo.
Entran famosos como Lomana, Chenoa, Vaquerizo o Chicote, que dices que te han sorprendido.
Yo creo que la selección también ha sido la correcta de elegir a gente viva, ¿no? La gente muerta normalmente no da tanto juego. Están todos muy bien, lógicamente no voy a decir quién está mejor o quién está peor, pero me han sorprendido un montón. Funciona muy bien el hecho de que hayan sido ellos mismos los que han dicho: “A mí lo que me pasa es esto”,  y que hayan contado las anécdotas que a ellos les hace más gracia. Se han preparado muy bien y todos han llegado muy seguros a la grabación, luego se han jiñado un poquito, a cada uno les he dado un consejito, y la verdad es que es sorprendente.


Estos famosos nuevos van a hacer monólogos sobre ellos mismos. ¿Es más difícil hacer humor de algo propio o de algo ajeno?
Es el principio del payaso. Reírse de uno mismo y mostrar las vergüenzas al público es lo que hace que éste se desbarate de risa. Es un truco antiguo como el circo. No todo el mundo es capaz, lógicamente, de reírse de sí mismo, de los prototipos, de lo que se ríe todo el mundo. Estos que han venido son capaces, y a mí me demuestra que además son valientes. Lo bueno es que como el material lo han proporcionado ellos, se ven más cómodos y funciona.


Esta temporada se grabó hace ya más de un año y quería saber qué has estado haciendo todo este tiempo.


Nada, rascarme la tripa. Por no decirte el higo. Yo soy muy buena no haciendo nada. Es lo que realmente mejor se me da. Sé estar sin trabajar, sé estar de vacaciones, y lo hago muy bien. Estoy empezando a pensar en dar cursillos para que la gente se relaje; tengo los trucos para vivir con poco dinero, para ahorrar y pasarlo bien. Es verdad que tengo un poco ahorrado entonces tampoco sufro.


Con lo de los supernovatos, ¿hay alguien que no haya ido y que quisieras tener? Haz un llamamiento a Letizia Ortiz o algo.


Está Letizia Ortiz como para hacer de cobaya. Bastante tiene la muchacha.


¿Y algún político?


A ningún político, sinceramente. Les estoy cogiendo una manía increíble porque me tocan mucho las narices. Con que hagan bien su trabajo me conformaría, o con que lo hicieran un poquitito mejor de lo que lo están haciendo. Me irrita profundamente la caspa política.  


También llega una nueva sección en la que recordáis épocas pasadas de los 15 años que lleva ‘El club de la comedia’. ¿Cuál sería para ti el mejor momento de las cuatro temporadas que llevas como presentadora?


Uy, qué pregunta más difícil. Mis greatest hits. Pues la verdad es que no lo sé, pero me lo pienso. ¿Sabes qué pasa? Que soy muy poco selectiva. A mí cualquier cosa me da mucha alegría, mucho bienestar… ‘El club de la comedia’ es para mí un programa que siempre es muy trepidante y además daos cuenta que yo me encuentro aparte de con actores que conozco y los que no, para estar con los monologuistas con los que yo empecé al principio de los tiempos. Es como si viniese alguien a tu casa a tomar algo. La grabación es tan rápida, porque no deja de ser un show de teatro, que tampoco tenemos mucho tiempo de trastienda. Me quedo con la sensación de sentirme muy anfitriona.


Dani Rovira imagino que es uno de ellos y ha saltado de monologuista a actor, que parece que se revela a estar encorsetado.


Ser monologuista todo el rato pues a lo mejor hay gente que se aburre. Bueno, Dani estudió para ser actor y no es lo mismo que otra gente que empezó por casualidad con monólogos y acabó haciendo una profesión. A mí por ejemplo donde más trabajo me han dado siempre es en monologuismo y a veces en presentar.
Respecto a la sección que hablábamos de la mirada al pasado, ¿no tenéis miedo de que la gente no lo vea como una novedad a causa de la saturación de repeticiones?


Pues sí, ese riesgo existe pero por otro lado es que a la gente le encanta. Yo, personalmente como espectadora que he visto muchos, lo veo un poco aburrido, pero a la gente le gusta y la selección de videos de estos 15 años es muy buena y entrañable.


¿Cuál es el estado de salud de los monólogos?


Yo creo que el monólogo desde que nació hace 15 años en España con ‘El club de la comedia’ y Paramount Comedy creo que ha vivido un momento de saturación porque hacía monólogos todo perro pichichi y la gente ya estaba un poco cansada. Yo creo que ahora hay una selección natural, sigue habiendo muchas rutas por España y teatros pero ya está todo un poco más instaurado.


Tampoco se ven en España muchas referencias a la escuela americana.


Yo creo que el humor es distinto. Cuando por ejemplo hacíamos el ‘Saturday Night Live’ y veíamos los sketches originales, hacíamos la traducción y grabábamos el nuestro, nos dábamos cuenta de que los tempos y los finales son muy distintos. De hecho hay monologuistas en España que son muy empollones del género y del formato americano y no terminan de cuajar aquí, porque es muy diferente. Nosotros tenemos el concepto de chiste mucho más empapado, de que la cosa empieza y acaba.
¿A qué recurres cuando la gente no se ríe de algún gag o algún chiste tuyo?


Yo creo, y esto lo hablo mucho con los guionistas y Carlos Herrero el director, que ‘El club de la comedia’ está tan lleno de chistes que no me siento mal cuando uno de mis chistes no funciona. Hay monologuistas y cómicos que tienden a buscar carcajadas y aplausos en cada subidita de tono del monólogo. A mí siempre me ha gustado mucho que el público sonría nada más; que no hace falta carcajada para notar que la cosa está funcionando. Luego también considero que explicar demasiado el chiste, forzarlo, es tratar al espectador como si no fuera inteligente. Yo estoy convencida de que la gente es inteligente de verdad y a lo mejor hay chistes que algunos no pillan, pero los que son más avispados agradecerán que el que está al lado no lo haya pillado. Y él sí. Siempre tengo la lucha cuando hacemos el primer ensayo con el equipo de cuando hay alguna cosa que me parece que es redundar o que es hacer demasiado fácil el chiste, yo tiendo a eliminarlo. Ellos siempre me intentan justificar que esas dos líneas que han escrito con tanto esfuerzo hay que decirlas, pero yo no les hago ningún caso y me las salto a la torera.
¿Eres de que también cuenta chistes malos?


Yo defiendo mucho el chiste malo. A mí me da un placer indescriptible cuando suelto un chiste malísimo y la gente me mira con cara de póquer. Caer en el vacío de un chiste malo, a mí me da gusto.
Fuiste durante dos años (en 2012 y 2013) la presentadora de los Premios Goya. ¿Cuál fue el motivo de que en 2014 no fueses tú la maestra de ceremonias?


A mí González Macho (el Presidente de la Academia de Cine) me llamó para presentarla, pero yo estaba segurísima de que no podía hacerlo. Cuando acabé mi segunda gala de los Goya dije: “Uy, esto ha quedado tan bien que me planto”. Me parecía un trabajo dificilísimo presentar la gala este año, porque si el año pasado el momento era muy bueno y había mucha expectación, ganas de lucha y los actores estaban enardecidos, este año había muchísima tristeza y era todo más dramático que cómico. Fue una decisión completamente personal. Le dejé el marrón a Manel directamente.