"La serie 'Vivo cantando' no es un musical en el que nos pongamos a cantar, pero al ser un karaoke sí que tendremos siempre canciones"
Primera entrevista al actor sobre 'Vivo Cantando'. Gorka Otxoa se ha convertido en uno de los rostros televisivos más populares gracias a series como 'Cuestión de sexo', 'Doctor Mateo' o 'Plaza de España'. Ahora está grabando la serie para Antena 3 'Vivo Cantando' donde será socio de un karaoke, así que hablamos con Gorka para que nos lo cuente todo sobre la nueva ficción.
Eres uno de los protagonistas de la nueva
serie ‘Vivo Cantando’, ¿qué nos puedes contar de ella?
Al
principio no nos dejaban contar nada y de hecho ahora siguen sin dejarnos
publicar fotos en Twitter, pero ya está presentada. Se estrenará en septiembre,
llevamos cinco o seis capítulos grabados, y prácticamente es una comedia
dramática musical, pero no nos ponemos de repente a cantar de la nada, pero
casi todo lo que ocurre gira entorno a un karaoke a las afueras de una ciudad,
como si fuera Vallecas, y lo llevo yo junto al personaje de José Luis García
Pérez. El tono de drama y de comedia está muy bien conseguido, los guiones son
muy chulos y la verdad es que nos lo estamos pasando muy bien. Y como es un
karaoke, pasa lo que suele pasar ahí, que la gente canta canciones que tienen
que ver con lo que está ocurriendo, con las situaciones… No es cantar por
cantar, y mientras cantan también hay secuencias que ocurren.
Entonces aunque no sea una serie musical,
la música sí que va a jugar un papel importante.
Sí,
sí. Hay una o dos canciones por capítulo, pero no son canciones enteras aunque
siempre son muy conocidas para que la gente se identifique con ellas pero
dentro de un karaoke.
Trama familiar aparte, sí que es una serie
nueva respecto a lo que estamos acostumbrados.
Sí,
en ese sentido sí. Se han visto hospitales, comisarías… Aquí tenemos un karaoke
que todos en mayor o menos medida hemos pisado alguna vez. El nuestro tiene ese
toque cutre que tienen todos los karaokes.
No por desarrollarse en un karaoke va a ser
una serie especialmente nocturna, ¿verdad?
No
siempre, aunque los momentos musicales desde luego sí que son en noche. Luego
estamos trabajando y hablando, y hay tramas entre nosotros tres: Roko que
trabaja como camarera, y estamos ahí que sí que no con nuestra historia de
amor; y luego el otro socio que es José Luis que a los tres nos pasan cosas de
día cuando está el karaoke vacío, pero las canciones y varias tramas ocurren de
noche. De hecho hemos grabado algún exterior noche, así que sí, le da a todo,
como la vida misma: ocurren cosas de días y cosas de noche.
Por tanto habrá más rollito con Roko que
con María Castro que es la protagonista…
Sí.
María Castro va a tener más con José Luis que son expareja. La serie comienza
con María volviendo al barrio porque su hermana tiene una enfermedad… Bueno, no
voy a contar nada más que en el primer capítulo ya ocurren muchas cosas que
tienen que ver con esto. Pero después de estar dando conciertos y verbenas en
pueblos y fiestas cutres, pues tiene que volver su personaje al barrio y ahí
tendrán ellos su historia.
¿Y tu historia? Háblanos de tu personaje
más detalladamente.
Yo
soy uno de éstos que es súper optimista, que tira siempre para adelante, que
antes pesaba 158 kg., de hecho hay una foto que lo certifica, y es de los que
se proponen algo en la vida y lo consiguen. En lo que piensa y en lo que cree
se cumple. Para él los libros de autoayuda son muy importantes, y los de crecer,
de aprender… Siempre optimismo. El karaoke lleva mucho tiempo cerrado sin
licencia porque no hay dinero, entonces mi personaje conoce al de José Luis en
la oficina del paro y le convence para abrirlo, entonces lo hacen como socios
los dos. Yo tengo una exnovia que aparece de vez en cuando también por ahí, hay
historias laborables con el socio de amistad, porque somos un poco como Don
Quijote y Sancho Panza. Y aparte la historia de amor, desamor, de todo, con el
personaje de Roko.
¿Qué otros escenarios veremos además del
karaoke?
Pues
hay mogollón. Nunca había visto un plató tan grande. Son como dos pisos y está
la casa de la hermana de María en la que acaba ella quedándose a vivir con sus
sobrinos, hay otra casa de otra familia, hay un bar de barrio, las calles
también de plató. la verdad es que hay bastantes decorados y bastantes metros
cuadrados.
Hace dos meses que empezó las grabaciones,
¿ya os habéis convertido en una familia y os sentís como en casa?
Pues
ahora por ejemplo estaba whatsappeando con José Luis chorradas varias y aunque
sea un tópico es verdad y hay súper buen rollo. Nos recogen a las 6 de la
mañana para ir a currar y vas como sobado a hacer comedia y llegas y te pones
las pilas. Aunque en la furgoneta vamos todos como si fuéramos sonámbulos.
Trabajar con Roko y José Luis, que son con los que más tengo, es una gozada y
hacemos un trío que está funcionando muy bien. Están muy contentos los
productores ejecutivos y la cadena. Nos lo pasamos muy bien y los directores
también molan mucho. Empezó Miguel Albaladejo con los primeros capítulos y terminará
él también la temporada, y es uno de los mejores directores de cine de este
país y controla muy bien el tono éste que mezcla drama y comedia que muchas
veces no es fácil conseguirlo y el director lo tiene claro. La verdad es que
está siendo una gozada de proyecto.
Prácticamente has ido enlazando series de
televisión, pero ¿ya tenías ganas de empezar una nueva después de ‘Plaza de
España’?
Sí,
además tengo unos recuerdos geniales de ‘Plaza de España’ porque era una serie
muy diferente y muy chula. Una sitcom de 25 minutos y sobre la Guerra Civil que
cuando me lo dijeron pensé: “Estáis locos”. Los guiones eran cachondísimos, la
verdad, y bueno, no funcionó, se emitió en verano, pero esto es así y no pasa
nada. Aquí estamos para empezar una
nueva serie.
Pero pasó algo con ‘Plaza de España’,
¿verdad? Que si renovaba, que si no renovaba… ¿Qué es lo que pasó?
Prácticamente
primero empezamos a grabar, luego nos cortaron a mitad temporada y no terminamos
de grabar. No sé por qué razones, si políticas con el tema o yo qué sé.
Decidieron parar de grabar antes de emitirla y se estrenó con buenos datos de
audiencia, pero sí que es verdad que fue bajando porque entró en agosto, y
decidieron no renovarla desgraciadamente como ocurre con la mayoría de series.
No hubo suerte, no siguió, pero guardo buenos amigos de allí y tengo grandes
recuerdos.
Y de las otras dos series por las que se te
conoce, ‘Doctor Mateo’ y ‘Cuestión de sexo’, ¿qué es lo que más echas de menos?
Imagino que de la primera será el irse a grabar a Asturias…
Pues
eso sí la verdad. Salir de Madrid cada dos semanas una semanita a Asturias
molaba. Además el pueblo es maravilloso y además se hacía un pequeño Gran
Hermano ahí porque estábamos todos ahí. Igual grababas una secuencia solo, pero
estabas todo el día e igual te ibas a la playita, o a comer, o de farra a tomar
algo, pero la verdad es que molaba salir del polígono industrial a Asturias.
‘Cuestión de sexo’ fue como la primera serie a nivel nacional que hice pues
tengo súper buen recuerdo también de la gente, de la serie que estaba muy bien
para un público muy joven, y con mi personaje me lo pasaba también muy bien.
Además hicimos tres temporadas y la productora y el equipo era el mismo con el
que hicimos luego ‘Doctor Mateo’.
Te hemos podido ver en alguna webserie como
‘Inquilinos’. ¿Crees que es el medio hacia el que deberíamos ir yendo?
Es
un futuro obligado, porque cuesta mucho sacar series adelante, y que funcionen,
y que se renueven, y que haya condiciones dignas… La gente tiene ideas y como
cuesta que te las aprueben porque las cadenas quieren cosas muy concretas, pues
otro tipo de series y proyectos tienen cabida en Internet. Por otro lado no
tienes ni los tiempos ni los medios que una serie normal y la calidad nunca va
a ser la misma, lógicamente, pero muchas veces son historias muy chulas e
interesantes con guiones muy bonitos. La pena es que llegan a menos gente
aunque algunas también lo han petado. Es otra vía como hacer películas de bajo
coste entre colegas y sacarlas adelante porque nos están abocando a ello. Eso
no te da para pagar la hipoteca, no sé luego dónde va a currar la gente. Pero
las webseries, bienvenidas sean.