Silvia es una de las grandes actrices de nuestro país, a la que estamos acostumbrados a ver en cine, en televisión y en teatro. El medio no le impide seguir trabajando en su profesión, en su pasión. La primera imagen que tengo de Silvia es en 'Pepe y Pepa', la hija pequeña de la familia, una familia que sin ella saberlo en aquella época, seguiría siendo la misma más adelante. Pues años después, seguiría siendo la hija de Tito Valverde, pero esta vez en 'El Comisario'. Seguiría siendo la hermana de María Adánez, pero esta vez en 'Aquí no hay quien viva'. Y seguiría siendo, no la hija pero sí la sobrina, de Verónica Forqué en 'Enloquecidas'.
Silvia ha representado multitud de papeles, pero su carrera no ha acabado. Ella tiene que seguir haciendo personajes y más personajes. Para ella ser feliz y hacernos feliz a todos los espectadores. Espléndida secuestrada fue en 'Acusados', con gran protagonismo y nadie se esperaba ese trágico final para ella, para la que era Laura Nieto. Y en el cine impresionó con 'A mi madre le gustan las mujeres', donde con su personaje de hippie hace un concierto memorable diciendo todo lo que piensa ante todo el público y, entre ellos, su familia. Ahora podemos seguir viéndola en la tele, con 'Piratas'. En el Festival de Cine Español de Málaga de 2011, su rumbo cambió, impidiéndole seguir con el rodaje de dicha serie y acudir días después a la Mostra de Valencia. Pero ella no se rinde, no se ha rendido y no lo va a hacer ahora.
¡Ánimo Silvia, sigue fuerte!
